Este sábado, la infanta Sofía ha acompañado a su padre el rey Felipe VI a la final de la Copa del Rey en Sevilla. Este evento marca la primera vez que la infanta asiste a un acto oficial sin la presencia de su hermana mayor, la princesa Leonor, en siete años. La presencia de la infanta Sofía en el palco del Estadio de la Cartuja ha sido una sorpresa para muchos, pero es conocido que la hija menor de los reyes comparte la afición al fútbol con su padre.
La infanta Sofía ha llegado al estadio junto a su padre en el mismo vehículo y ha sido recibida por los responsables del fútbol español, incluyendo el presidente de la Federación Española, Luis Rubiales. Rubiales es un conocido de la infanta Sofía, ya que el año pasado fue su anfitrión cuando ella y su hermana asistieron al duelo entre la selección nacional y la selección de Dinamarca. Esta visita confirmó que el fútbol es una de las mayores aficiones de la infanta Sofía.
En el palco del estadio, la infanta Sofía ha vestido de manera informal y cómoda, llevando pantalones blancos, una camisa verde estampada y bailarinas en tono nude. La hija menor de los reyes ha sido la nota de color en un palco lleno de trajes de chaqueta y corbatas, mayormente ocupado por hombres. La presencia de la infanta Sofía en la final de la Copa del Rey ha sido más por su anhelo que por cuestiones oficiales.
La confirmación de la infanta Sofía, que se celebrará el 25 de mayo en una iglesia del barrio madrileño de Aravaca, será muy probablemente la última oportunidad de ver a la hija de los reyes antes de que la princesa Leonor finalice sus estudios en Gales en un par de semanas. Se espera que la familia real asista al evento en su totalidad. La presencia de la infanta Sofía en la final de la Copa del Rey ha sido una sorpresa agradable para los fans de la familia real, quienes han visto a la hija menor de los reyes compartir una tarde deportiva con su padre.