Poco a poco, con esfuerzo y dedicación, Lola Índigo se ha ido consagrando como una de las referencias españolas de la música urbana. Entre canciones de éxito y colaboraciones con personalidades de relevancia internacional, como Quevedo, Luis Fonsi, María Becerra o Rauw Alejandro, la artista de 31 años ha hecho méritos para colarse en la élite.
Pero hay una historia previa a nuestros días que fue forjando a ‘Mimi’. Su entusiasmo por la música viene desde su infancia. Lola Índigo comenzó bailando flamenco en Granada y a sus 20 años se mudó a China para trabajar y aprender sobre las artes urbanas. Entre su experiencia en Asia y sus ocasionales viajes a Los Ángeles, la madrileña se ha ido haciendo con un conocimiento completo en la materia, sin el cual sería difícil explicar su éxito actual.
Lola participó de ‘Fama Revolution’ en 2010 y de ‘Operación Triunfo’ en 2017, siendo expulsada muy tempranamente en ambos certámenes. Pero Miriam Doblas Muñoz, como se llama realmente, no se rindió: en 2018 publicó su primer single, ‘Ya no quiero ná’, una virtuosa fusión de reggaetón, funk y trap, y desde allí comenzó su ascenso hacia lo que conocemos hoy, es decir, su estrellato en la música urbana. Poco después de eso, en 2019, los premios MTV Europe Music Awards la reconocieron como la artista española del año.
Mucho tiempo pasó desde aquel entonces y, recientemente, Lola Índigo ha estrenado su tercer álbum, llamado ‘El Dragón’. Son 11 canciones (y entre ellas, varias colaboraciones) por un total de aproximadamente 34 minutos de música urbana del más alto nivel, que son la prueba cabal de su consagración. Con trabajo y paciencia, ‘Mimi’ logró llegar hasta donde soñaba.
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